Nuestro más reciente proyecto MPC-Buoy ha comenzado en Littlefield, Texas, y tiene el objetivo de reducir la floración de algas nocivas (FAN) y mejorar la calidad del agua.
En la semana pasada empezaron un nuevo intento para tratar algunas de las aguas contaminadas. El proyecto consiste en utilizar tecnología ultrasónica que afecta directamente el crecimiento de las algas, evitando que formen floraciones dañinas.
Otros proyectos MPC-Buoy ya están controlando el crecimiento de algas en Houston, Pasadena, pero los problemas que enfrenta el estado de Texas se han desarrollado durante varios años. Texas es uno de los estados más afectados por las sequías, lo que contribuye a la floración de algas dañinas.
Texas es el segundo estado más poblado de Estados Unidos, más grande que cualquier país de Europa. Millones de personas dependen del agua (potable) limpia y segura.
FAN: una preocupación creciente
Houston y Littlefield no son las únicas ciudades afectadas por las FAN.
En 2019, fueron reportadas algas verde-azuladas tóxicas en Austin, que tomaron la vida de al menos cinco perros que entraron en contacto con las aguas verdes. Desde entonces, ha sido un problema en lagos y arroyos de la región. En septiembre de 2021, los Centros de Control y Enfermedades (CDC) advirtieron sobre los riesgos para la salud de los seres humanos. Las organizaciones ambientales en Texas comenzaron a presionar a las autoridades para que controlen la reducción de la contaminación del agua en el estado. Ilan Levin, director del Proyecto de Integridad Ambiental, declaró que: “a lo largo de los años, Texas ha dado luz verde a una gran cantidad de contaminación de nuestras vías fluviales, al permitir que los desarrolladores y otros contaminadores reduzcan el proceso de revisión de permisos, requerido legalmente, que está destinado a preservar nuestros ríos y arroyos “.
Lo más preocupantemente es que a finales de septiembre se descubrió una nueva toxina, la Cylindrospermopsin, que tiene el potencial de causar efectos colaterales en humanos y animales. Los expertos en salud aconsejaron a las personas que eviten el contacto con aguas en las que haya algas.
Aumento de las floraciones en todo EE. UU.
Las FAN han aumentado significativamente en los últimos 40 años en los EE. UU. y se han convertido en un grave problema ambiental en los 50 estados. Son un desafío global emergente que afectan a las aguas dulces, salobres y saladas. Es probable que estas floraciones dañinas ocurran con más frecuencia, a medida que empeoren las sequías y el calentamiento, impulsados por el cambio climático.
Las floraciones de algas vienen en muchas formas y tamaños. Pueden dejar las aguas de color verde, marrón, amarillo, rojo o incluso rosa. Pueden crecer de forma natural o como consecuencia de las actividades humanas. La mayoría de las floraciones de algas en agua dulce en los EE. UU. son producidas por cianobacterias, también conocidas como algas verdiazules. Aunque en realidad son bacterias, pueden realizar la fotosíntesis, al igual que las algas.
Contaminación por nutrientes
La contaminación por nutrientes (nitrógeno y fósforo), las temperaturas cálidas y el agua estancada son factores que combinados, alimentan la proliferación de FAN. Aunque no todas las floraciones son tóxicas, en condiciones específicas pueden volverse peligrosas para las personas, las mascotas y para el ecosistema acuático. Incluso si la entrada de nutrientes se detuviera hoy, los nutrientes heredados en el sedimento causarán floraciones de algas en las próximas décadas.