La empresa de agua más grande de Bulgaria, Sofiyska Voda, que es parte de Veolia, proporciona agua potable a aproximadamente 1,4 millones de personas que viven en Sofía, la capital.
El embalse de Iskar es el embalse más grande de Bulgaria y una importante fuente de agua potable e hidroelectricidad. También es un destino popular de fin de semana para la población de Sofía y sus alrededores.
A fines de julio, la empresa inició un proyecto de monitoreo digital con el objetivo de asegurar y modernizar la red de suministro de agua en la ciudad capital. Esto convierte a Sofiyska Voda en la primera empresa de agua de los Balcanes en invertir en la gestión sostenible y digital de los recursos hídricos.
El embalse de Iskar es vulnerable a diferentes tipos de contaminación, incluyendo la floración de algas nocivas. Por lo tanto, la empresa de agua operada por Veolia instaló la tecnología MPC-Buoy para aumentar la seguridad de su suministro de agua potable.
En caso de que las algas contaminen, la MPC-Buoy emitirá ondas ultrasónicas en el agua para detener su crecimiento. Esta tecnología fue elegida por su función de monitoreo en tiempo real, así como por su sistema de alerta anticipada.
El sistema inteligente tiene funciones de alarma integradas cuando detecta cambios en la calidad del agua. El software especializado crea automáticamente un pronóstico basado en los datos que recibe. Por lo tanto, la MPC-Buoy ofrece una imagen precisa de lo que está sucediendo en el cuerpo de agua, evitando la posible degradación de la calidad del agua.
La tecnología se ha implementado con éxito y ya está transmitiendo información en tiempo real a un software en línea. Unas horas después de la instalación, se mostraron los primeros datos sobre turbidez, pH, temperatura, oxígeno disuelto, ficocianina y clorofila.