La NASA acaba de publicar un nuevo conjunto de datos que muestra que 2300 lagos en los EE. UU. están contaminados con cianobacterias.
En agua tibia, estancada y rica en nutrientes (nitrógeno y fósforo), las cianobacterias, también conocidas como algas verdiazules, pueden formar FAN. Algunas FAN son tóxicas y dañan los ecosistemas acuáticos, las personas, los animales, así como el suministro de agua potable, la economía y las actividades recreativas.
El nuevo estudio se publicó en la revista Remote Sensing of Environment y se basa en mediciones satelitales estandarizadas que datan desde 2002.
Las autoridades estatales y los investigadores han estado utilizando estos datos para monitorear y controlar a las floraciones dañinas. Ahora, el público en general y los legisladores también pueden obtener actualizaciones casi en tiempo real sobre las cianobacterias en más de 2300 lagos en los EE. UU. y otros 5000 en Alaska.
Estos datos son muy valiosos para los funcionarios ambientales estatales, tribales y federales, ya que no tienen que depender de la notificación pública para saber de qué cuerpos de agua tomar muestras.
El nuevo conjunto de datos de la NASA contiene un índice de riesgo para la salud relacionado a las cianobacterias, datos brutos y mapas. Los datos y las herramientas fueron proporcionados por Cyanobacteria Assessment Network, una colaboración entre la NASA, la Agencia de Protección Ambiental, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica y el Servicio Geológico de los Estados Unidos.
En 2017, los funcionarios ambientales y de salud pública en Utah respondieron rápidamente a una floración de algas dañinas y pudieron advertir al público después de que los datos satelitales revelaron altas concentraciones de cianobacterias. La detección temprana de la floración permitió ahorrar cientos de miles de dólares en atención médica.
Este tipo de datos no solo proporcionará información sobre un lago específico, sino que también ayudará a comparar las floraciones a lo largo del tiempo en los EE. UU. Aportará información valiosa sobre cómo está cambiando la floración de algas, de qué manera y en qué medida. Y lo más importante, los datos permitirán un mejor monitoreo y una respuesta más rápida.